cada mañana al bajar de la cama,
no me decido ¿derecho o izquierdo?
me juego mi suerte, acecha la muerte.
Dudo al tratar de mezclar los colores
según lo exijan las situaciones,
banalidades de suma importancia
errores sin gracia se pierde la magia .
Y de repente me miras distinto
algo ha cambiado, será algo que he dicho.
Y sin dudarlo me niegas la mano
me vuelvo a perder en este oscuro trato.
Siento caer todo el peso en mis hombros
y al segundo soy sólo escombros,
ruinas de ideas y vagos recuerdos
un nombre en sus rezos se visten de negro.
Y de repente pierdes tu sitio,
quisiste volar y caíste al vacío
y sin dudarlo te tiendo una mano.
Y vuelvo a perder en este injusto trato.